Tipos Inteligencia Emocional

Tipos de Inteligencia Emocional

Aroa Ruiz Aroa Ruiz (Psicólog@)

14 abril, 2023

En anteriores artículos del blog llamados, “Inteligencia Emocional: El Arte de la Interpretación" y “Daniel Goleman, el padre de la Inteligencia Emocional” ya os hablamos de los componentes que desde el modelo de Goleman encontramos dentro del concepto de Inteligencia Emocional.

Pues bien, hoy en este post vamos a profundizar y a concretar más sobre ellos y en los diversos tipos de Inteligencia Emocional que se han establecido según los tres modelos que en el IEPP consideramos más relevantes en lo que a Inteligencia Emocional se refiere.

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Modelo de Goleman

En el modelo de Goleman del año 1995 existen cinco dimensiones y competencias que conforman la Inteligencia Emocional y que se pueden aprender. Las personas pueden identificar las habilidades que necesitan para actualizar y luego trabajar para mejorar tales competencias.

  •  Competencias Personales. Relacionadas con el modo en que nos relacionamos con nosotros mismos.

1. Autoconciencia emocional

Hace referencia a nuestra capacidad para entender lo que sentimos, reconociendo las propias emociones y sus efectos.

Incluye el conocimiento de las propias fortalezas y debilidades.

Por ejemplo, cuando estás triste, ser consciente de que estás sintiendo esa emoción en ese momento determinado. Siempre que tengamos en cuenta estas realidades internas aumentará la autoconfianza y sabremos actuar en consecuencia.

2. Autorregulación

Capacidad de manejar adecuadamente las emociones y los impulsos conflictivos, siendo fieles al criterio de sinceridad e integridad y asumiendo la responsabilidad de nuestras actuaciones personales. Incluye la adaptabilidad (flexibilidad para afrontar los cambios) y la innovación (sentirse cómodo/a y abierto/a ante las nuevas ideas, enfoques e información).

 3. Motivación

Habilidad para orientarnos hacia nuestras metas, de recuperarnos de los contratiempos y focalizar todos nuestros recursos personales en un objetivo. Si aunamos compromiso, iniciativa y optimismo, seremos capaces de sobrellevar cualquier dificultad para seguir conquistando triunfos y logros.

  • Competencias sociales. Relacionadas con el modo en que nos relacionamos con las demás personas

4. Empatía

Es nuestra forma de relacionarnos e interactuar tomando conciencia de los sentimientos, necesidades y preocupaciones de las demás personas.

Se expresa con gestos, con un tono de voz particular, con determinadas posturas, miradas, expresiones… con el fin de  captar los sentimientos y los puntos de vista de otras personas e interesarse activamente por las cosas que les preocupan. Nos ayuda a establecer vínculos más fuertes, lazos sociales y afectivos más profundos.  

5. Habilidades sociales

La capacidad para inducir respuestas deseables en los demás, comunicarse con efectividad y de modo asertivo, saber manejar los conflictos, colaborar y cooperar con las demás personas… En definitiva, esas dinámicas comportamentales que hacen que nuestras relaciones sean más satisfactorias. 

Goleman, tras formular su modelo en 1995, realizó unas revisiones en cuanto a las competencias y subcomponentes del mismo, basándose en las  aportaciones de otros autores clave en la Psicología Positiva, destacando que la IE consiste en saber manejar la positividad (Seligman, 2013) y la creatividad (Csikszentmihalyi, 1990). Ello da origen a una nueva teoría basada en el desempeño organizacional de la IE en la que define cada dimensión con una amplitud mayor (Goleman, 1998). 

Tras esa revisión cada dimensión se define de forma más amplia. Se introduce el componente de la motivación en el campo de la autorregulación y se nombran algunas competencias, por ejemplo, la sinceridad como transparencia, así como el aprovechamiento de la diversidad se integra dentro del componente empático (Boyatzis, Goleman, y Rhee, 2000) y se funde la habilidad comunicativa dentro de la competencia de la influencia (Goleman, Boyatzis, y Mckee, 2002).

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Modelo Bar-On

Según este autor, la inteligencia emocional-social es un “conjunto de competencias y habilidades emocionales y sociales interrelacionadas que determinan cómo, de forma efectiva, los individuos se entienden y expresan, comprenden a los demás y se relacionan con ellos y hacen frente a las exigencias, los retos y las presiones cotidianas” (Bar-On, 2010).

Las competencias y habilidades emocionales y sociales a las que se refiere esta conceptualización de la IE incluyen cinco metacomponentes, y cada uno de ellos comprende a su vez una serie de competencias y habilidades estrechamente relacionadas.

Estos cinco metacomponentes son los siguientes:

  • Componente intrapersonal
  1. Autoidentificación general del individuo: Percibir, comprender y aceptarse a sí mismo.
  2. Autoconciencia emocional: Ser consciente y comprender las propias emociones.
  3. Asertividad: Expresar de forma eficaz y constructiva los propios sentimientos a uno mismo.
  4. Autorrealización: Expresar de forma eficaz y constructiva los propios sentimientos y a uno mismo.
  5. Independencia emocional: Ser autosuficiente y no depender emocionalmente de los demás.
  • Componente interpersonal
  1. Empatía: Ser consciente de los sentimientos de los demás y comprenderlos.
  2. Responsabilidad social: Identificarse con el propio grupo social y cooperar con los demás.
  3. Relaciones sociales: Establecer relaciones mutuamente satisfactorias y relacionarse bien con los demás.
  • Componente de gestión del estrés
  1. Tolerancia al estrés
  2. Control de impulsos
  • Componente de estado de ánimo
  1. Optimismo: Ser positivo y ver el lado bueno de la vida.
  2. Satisfacción: Sentirse contento con uno mismo, con los demás y con la vida en general.
  • Componente de adaptación-ajuste
  1. Prueba de la realidad: Validar objetivamente los propios sentimientos y pensamientos con la realidad externa.
  2. Flexibilidad: Adaptar y ajustar los propios sentimientos y pensamientos a nuevas situaciones.
  3. Resolución de problemas: Resolver eficazmente problemas de carácter personal e interpersonal.

Bar-On dividió las capacidades emocionales en dos tipos principales (Bar-On, 2000):

  • Capacidades básicas, esenciales para la existencia de la IE: la autoidentificación, la autoconciencia emocional, la asertividad, la empatía, las relaciones sociales, la tolerancia al estrés, el control de impulsos, la prueba de realidad, la flexibilidad y la resolución de problemas.
  • Capacidades facilitadoras, que contribuyen a potenciar la IE: el optimismo, la autorrealización, la satisfacción, la independencia emocional y la responsabilidad social.  

Modelo de Mayer, Salovey y Caruso

Mayer, Salovey y Caruso son los autores de referencia en el desarrollo de un modelo muy completo que aborda los diferentes bloques y variables que conforman la Inteligencia Emocional.

Detallaron el concepto de IE como una habilidad de gestión de los estados emocionales que incluiría su percepción, comprensión, manejo y  utilización constructiva (Mayer y Salovey, 1997).

Este modelo cuenta con una gran validez empírica (Salovey y Mayer, 1990; Mayer y Salovey, 1997; Salovey, Bedell, Detweiler, y Mayer, 2000) en el área de cognición y emoción, y presenta buenos niveles de coherencia y consistencia teórico-conceptual (García, 2003).

Para ellos existen tres elementos fundamentales: el concepto de IE, la naturaleza de las emociones y las habilidades mentales involucradas en la IE.

  1. La Inteligencia Emocional se define como el conjunto de habilidades para percibir y expresar emociones, comprender y razonar las emociones y regular emociones de uno/a mismo/a y de otras personas. Esas habilidades explican por qué existen diferencias en la exactitud y precisión de la percepción y comprensión emocional entre las personas.
  2. Las emociones, que tradicionalmente se han considerado como puramente afectivas, en este modelo se consideran representaciones mentales, es decir, se utilizan para dar significado al mundo que nos rodea.
  3. El modelo se basa en las habilidades que puede trabajar una persona para incrementar su IE, y se divide en cuatro componentes (ramas) que son enumerados en un orden ascendente, desde los procesos más esenciales “percepción emocional” hasta los más amplios “regulación de las emociones”.  

Cada uno de los cuatro componentes de este modelo son: (Sánchez et al., 2019):

  1. Percepción, evaluación y expresión emocional: constituye la rama más baja y se refiere a la habilidad que permite al sujeto,  mediante las expresiones faciales o la voz, identificar tanto las emociones propias como las del resto. Los sujetos son capaces de expresar correctamente sus sentimientos, así como de exponer necesidades en torno a aquellos sentimientos. 
  2. Facilitación emocional del pensamiento: consiste en la capacidad que permite al sujeto conectar las emociones con las sensaciones (por ejemplo, el sabor y el olor), y a través de ellas les facilita el pensamiento. En esta dirección, las emociones son las que permiten dirigir o redirigir el pensamiento, enfocando la observación hacia la información más significativa. 
  3. Comprensión de las emociones: esta habilidad permite la resolución de los problemas, así como la identificación de emociones semejantes, siendo la empatía el aspecto fundamental de este componente.
  4. Regulación reflexiva de las propias emociones para promover el crecimiento: consiste en aquella capacidad que abarca la apertura de todo tipo de sentimientos, es decir, tanto efectivos, como nocivos. 

Cada componente incluye a su vez, cuatro habilidades que aparecen y se integran progresivamente de  manera cada vez más madura y eficaz a lo largo del desarrollo de la persona.

Fuentes de datos:

  • Bar-On, R. (2010). Emotional intelligence: An integral part of positive psychology. South African Journal of Psychology, 40(1), 54-62. 
  • Goleman, D (1995) Emotional Intelligence – Why it can matter more than IQ. Bantam Books. New York.
  • Goleman, D. (1998).What Makes a Leader? Harvard Business Review, 76(6), 93-102.
  • Mayer, J. D. & Salovey, P. (1997). What is emotional intelligence?  En  P.  Salovey  &  D.  Sluyter  (Eds.),  Emotional      Development      and      Emotional      Intelligence:  Implications  for  Educators  (pp.  3-31). New York: Basic Book.

Aroa Ruiz
Aroa Ruiz

Licenciada en Psicología, Máster en Coaching e Inteligencia Emocional e Instructora de Mindfulness. Psicóloga, Coach y Docente en el Instituto Europeo de Psicología Positiva.

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