Propósitos de Año Nuevo: 15 puntos Clave

Sonia Castro (Psicólog@)

16 febrero, 2023

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“Un año, 12 meses, 52 semanas, 365 días, 8760 horas, 525600 minutos, 31536000 segundos…” 

Año nuevo, vida nueva

Dejar de fumar, aprender inglés, sacar el carnet de conducir, apuntarse al gimnasio, terminar la carrera, dejar de morderse las uñas, cambiar de trabajo, comprar un piso, conocer ese país lejano, ahorrar… ¿te suenan?

Estos son algunos ejemplos de propósitos de año nuevo que resuenan en nuestra cabeza año tras año cuando el mes de Diciembre toca su fin y recibimos el nuevo año rodeados de cotillón, champagne, sidra, música y polvorones.

Y es que hasta ahora cada fin de año era parecido: mucha ilusión, ganas, reflexiones, motivación a tope y la lista de buenos deseos por cumplir a lo largo de los siguientes 12 meses en la cabeza, e incluso en la cabeza y anotados también en el papel.

Y después, tras esa inyección de buena actitud al inicio de año y de fuerza de voluntad, otra vez los propósitos se quedaban en el camino y aparecía la dificultad por mantenerlos y por conseguir alcanzarlos.

¿Cómo es posible?, ¿por qué no se consigue?, ¿tienes ya tus propósitos de año nuevo?, ¿te gustaría poder conseguirlos definitivamente? Entonces sigue leyendo porque aquí estamos para ayudarte a ello.

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Cómo realizar los propósitos de Año Nuevo

En el podcast #39 de las pasadas Navidades, Dafne Cataluña y Eva Rodríguez ya lo hablaron y lo explicaron con todo detalle, pero hoy también desde el blog del IEPP queremos dejarlo por escrito; así que a continuación vamos a ver cuáles son esos tips que nos pueden ayudar de cara a que los objetivos y propósitos de Año Nuevo no se dispersen a las pocas semanas.

Vamos a ver cómo hacer los propósitos de Año Nuevo:

• Pensar, valorar, hacer un ejercicio de introspección y revivir desde el recuerdo el año que despedimos, recordar sin prisa los meses pasados y poder partir y elegir los propósitos futuros desde ahí.
• Buscar deseos y metas que te hagan la vida más fácil y que tu mayor objetivo del próximo año sea encontrar un equilibrio y metas de verdad significativas de cara a sentirte más feliz. Sobre la felicidad puedes leer más en nuestros artículos: felicidad que bonito nombre tienes y lo tengo todo pero no soy feliz.
• Marcar metas, objetivos y propósitos que de verdad sean importantes para nosotros, hemos de ser selectivos y darle prioridad  a lo verdaderamente prioritario.
• Los propósitos más habituales y comunes suelen ser hacer más deporte, perder peso, dejar de fumar, dedicar más tiempo a estar con la familia, buscar pareja, tener hijos… pero, ¡ojo! que sean los más frecuentes y repetidos en la población, no significa que se ajusten y sirvan también para ti. Y es que cada persona ha de buscar y encontrar sus propias metas. Dime, ¿sabes ya lo que de verdad quieres?
• No deseches y des por perdido un objetivo o propósito que te planteaste hace tiempo y no se cumplió años atrás. Es importante aprender de los errores y de la experiencia y quizá toca renovar y replantear de nuevo ese mismo propósito. ¡Ánimo!
• Una vez que tengamos el propósito elegido, habrá que formularlo de manera concreta, realista, detallada y muy específica.
• No podemos ponernos metas exageradas, inalcanzables y/o desproporcionadas. No busques grandes desafíos, vamos a ser conscientes desde la honestidad y la humildad de nuestras capacidades, medios y limitaciones.
• Ayúdate de papel y bolígrafo, y es que sigue siendo buena idea escribir los propósitos en papel. Poder acudir a la lista y verlos en algún posible momento de recaída nos ayudará a tenerlos de nuevo presentes.
• Lo primero que tendrá nuestro propósito será un “verbo” y después toda la información detallada que lo acompañe.
• Es fundamental que la persona conozca y sea consciente del momento en el que consiga alcanzar el propósito u objetivo.
• Hay que establecer una fecha, concretar el tiempo es importante.
• Hacer reajustes en las fechas marcadas si no llegamos a tiempo es totalmente entendible y no pasa nada si ocurre.
• Nuestro propósito ha de estar conectado con una motivación intrínseca, es decir con algo que realmente sea importante para mí, con algo que me haga sentir bien y mejor de forma auténtica.
• Una estrategia que nos ayuda a encontrar esa motivación intrínseca es tirar de nuestras fortalezas equilibradas, si aún no sabes que son las fortalezas, mira este post de Fortalezas Personales.
• Vincula tu propósito u objetivo de Año Nuevo con tus fortalezas en color verde, las que tengas en equilibrio y esto hará que sea más sostenible en el tiempo ya que la energía no se perderá con tanta facilidad. Si quieres realizar tu test basado en el Método FORTE y aprender a interpretarlo, accede aquí.

BONUS

Por último no te olvides de agradecer, pon en práctica la fortaleza de la Gratitud, te cambiará tu estado de ánimo de forma radical. Conoce aquí todo sobre el poder de la gratitud.

Sabemos que este año, sin ninguna duda habrá traído momentos duros, difíciles, complicados, pero haz un esfuerzo por rescatar esos otros momentos felices, de alegría, de logro personal (que seguro que también los ha habido) y siéntete agradecido o agradecida por haberlos experimentado. Cuando damos las gracias, nos sentimos mejor 😉

Ahora que ya sabes algo más, aún estás a tiempo para elegir tus propósitos de cara al próximo año y ponerlos en práctica.

Piensa en todo lo conseguido en el año que ya despedimos y ponte en marcha para sentirte un poquito más feliz.

No olvides que cambiar tu vida depende de ti, tú eres el/la único/a responsable de tus decisiones y de tus acciones, y el siguiente año te brinda una nueva oportunidad inmejorable para esos cambios. ¡Vamos a por ello!

¡Feliz Navidad y Feliz Año!